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entrevista
«El PSOE no ha visto el cambio sociológico de la Comunitat hacia el centro derecha»
02.01.11 - 03:33 -
Hace algo más de tres años, Joan Ignasi Pla dimitió tras denunciarse un supuesto trato de favor en la reforma de su casa. Asegura «estar orgulloso» de su decisión «porque puse muy alto el listón de la responsabilidad política que otros han puesto en el suelo». Respecto a las elecciones, es partidario de «no bajar esfuerzos», ya que está convencido de que las encuestas no dicen toda la verdad. También, advierte a Madrid de que el PSPV no es culpable de las derrotas, sino el cambio sociológico de la Comunidad.
-¿Cómo ve el panorama político?
- Con una gran incertidumbre que en la coyuntura actual no ayuda a afrontar el futuro con garantías.
¿Se arrepiente de haber dimitido?
-Yo salí de la política porque estaba convencido de que mi salida podría contribuir a mejorar la posición de mi partido de cara a las elecciones generales, pues, en aquellos momentos, el PP podría aprovechar la situación y por eso decidí apartarme, porque asumí mi responsabilidad. Aunque estoy convencido de que no había razón alguna para dimitir, pensé que era lo mejor. Con ello, situé el listón de la responsabilidad política muy alto.-¿Volvería a hacer lo mismo?
-Por supuesto, porque la política exige ser coherente. Estoy convencido de que no cometí ninguna irregularidad, ni tenía motivo para dimitir, pero es verdad que en ocasiones en política hay que asumir responsabilidades cuando se cometen errores. Quizás cometí un error y asumí responsabilidades. Es verdad que después han venido situaciones que han ido reduciendo ese listón de la responsabilidad política hasta dejarlo en el suelo.
-¿El PSPV es alternativa ?
-Sí. Otra cosa es que se traduzca en votos y eso no lo sabremos hasta mayo. El PSPV está en una fase de transición, y eso siempre genera una cierta debilidad. Además, hay que construir un liderazgo social y eso cuesta, sobre todo si el PP tiene todos los medios para impedir que nuestro secretario se conozca.
-¿Cómo influirá la crisis?
-Estamos en una coyuntura que viene marcada por la crisis económica que los ciudadanos interpretan desde sus preocupaciones y en todas partes de Europa el coste es para los gobiernos. El coste va a ser para el PSOE, porque estamos gobernando y tomando decisiones.
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¿Por qué no pasa factura al PP-CV?
¿Por qué no pasa factura al PP-CV?
- Es por la hegemonía que tiene instaurada el PP y que hace que muchos ciudadanos crean que determinadas decisiones de las que ellos son responsables no correspondan a ellos. Ahí, han jugado muy bien la baza del victimismo, la afrenta contra el PSOE y contra Zapatero.
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¿Cómo puede el PSPV romper esa hegemonía?.
¿Cómo puede el PSPV romper esa hegemonía?.
-Se puede romper, aunque va a costar. Pero se conseguirá. Yo estaba convencido que lo íbamos a conseguir en 2007. Ese resultado más allá de consideraciones frívolas que se realicen desde Madrid, demostró que el PSPV no era el problema, pues habíamos estabilizado el partido e implicado a la gente, haciendo la campaña más activa en nuestra historia.
-¿Por qué no se consiguió?.
-El problema es que la sociedad valenciana ha evolucionado de una manera muy distinta a lo que la gente en Madrid. Y en otras partes piensan que no conocen nuestra realidad sociológica. Estoy cansado de escuchar valoraciones en el PSOE y creadores de opiniones sobre los problemas del PSPV. El problema es la sociedad valenciana que ha experimentado un viraje hacia el centro derecha. El mejor ejemplo son las encuestas del CIS. Mientras en España la población se sitúa en el centro izquierda, aquí hacia la derecha.
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¿Madrid no entiende la situación de la Comunidad?.
¿Madrid no entiende la situación de la Comunidad?.
-Efectivamente. Pero nos afecta a ambos partidos. En nuestro caso, la dirección federal ve a esta Comunidad con unos ojos del pasado, pensando que continúa siendo el bastión de la izquierda perdido por la inutilidad de PSPV, cosa que no es verdad, sin darse cuenta de la evolución sociológica de esta Comunidad. Además, en otros casos tampoco se conoce a la Comunidad porque piensa que es rica cuando no lo es, y no se dan cuentan de las muchas carencias que tenemos para ser la comunidad que lidere el progreso.
-¿Por qué sucede eso?
-Nos ha faltado tener suficiente altura de miras a todos, es decir, al PSPV, al PP-CV y a los líderes empresariales valencianos para ir juntos reivindicar ante Madrid las carencias esenciales que tenemos. No sólo ahora, sino también en la época de Aznar. Por ello, para mí fue muy importante la reforma del Estatuto, porque era una forma decir al resto de España que los valencianos éramos capaces de sumar. Sin embargo, ni la sociedad, ni el PP ha continuado en esa senda. Si hubiéramos tenido un carácter más solidario y no la tentación de aprovechar los grandes temas de infraestructuras, financiación y servicios sociales otro gallo nos cantaría.
-¿Qué le falló a usted para no ser presidente?
-Lo que falló fue que la situación de bienestar económico y de autoestima que se vivía en la Comunidad Valenciana en esos momentos, auspiciada por la publicidad y propaganda de los grandes eventos, hacía que muchos ciudadanos pensaran que no era bueno cambiar. Esa fue la cuestión. Teníamos un programa serío, que aún tenemos, y gente seria, pero la situación no era favorable.
-¿Puede lograrse?.
-La clave es continuar trabajando en la misma línea hasta romper la hegemonía popular, reposicionándonos en algunos temas como financiación, agua y grandes eventos y, sobre todo, trabajar , ahora, con más esfuerzos, pues empiezan a existir bastantes ciudadanos cansados de los discursos vacios y huecos de los grandes eventos en que nos sitúan el PP y Camps.
-Las encuestas no dicen eso
-De momento. Los milagros se piden en otra parte. De la noche a la mañana no pueden cambiar las cosas. La alternativa que se está construyendo tiene que tener una visión a medio y largo plazo. No se puede espera que los ciudadanos cambien radicalmente su posición. Ahora bien, no creo que las encuestas que se están publicando reflejen fielmente lo que pueda pasar el 22 de mayo. Queda mucho, con una situación muy incómoda para el PP y la candidatura del presidente Camps, y queda un tiempo donde los ciudadanos pueden madurar muchas cosas. Soy de los que piensa que en la situación de debilidad en que se encuentra el Gobierno valenciano, de falta de iniciativa y de fracaso de sus políticas, no me creo que no les pase factura.
-¿En sus años al frente del PSPV sintió el apoyo de Madrid?
-Yo siempre me he sentido apoyado por Zapatero y su Gobierno. Lo que pasa es que determinadas situaciones vinculadas al sentimiento, como fue el agua, y la derrogación del trasvase del Ebro nos lastró y remontar así posiciones, en una situación con los vientos favorables al PP, era difícil. De todas formas, el resultado demostró la fortaleza del PSPV, porque sacar el 35% de los votos es bueno. Muchos opinan desde fuera y no ven que el PSPV saca un 35% de los votos, mientras que en otras partes de España se gobierna con el 18% de los votos, por ejemplo, en Baleares o en su momento en Cataluña.
-¿Qué opina de las situaciones de los casos Brugal y Gürtel?
-Los que están implicados en esos dos casos tienen que pensar que más allá de las responsabilidades judiciales, que decidirán los juece,s existen unas responsabilidades políticas y más allá de la presunción de inocencia que a todos se les presupone deberían pensar si han contribuido o no a mejorar la imagen de la política manteniéndose en el puesto.
-¿Quién tenía que haber dimitido?
-No voy a valorarlo. Eso forma parte de una decisión personal que cada responsable político debe hacer pensando no sólo en su partido sino en el conjunto de la sociedad.
-En alguna cinta se apuntaba que usted habló con Ángel Fenoll.
-Yo no conozco a ese señor.
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